El sacrilegio más común: Comulgar habiendo faltado a Misa en Domingo
¿Qué es un sacrilegio?
Es una falta de respeto por algo sagrado.
Puede ser “sacrilegio personal” si se insulta a un sacerdote o su trabajo. “Sacrilegio local” si se profanan lugares sagrados como altares, iglesias o cementerios. En este caso, hablaremos del “sacrilegio real”, cuando se profanan cosas sagradas, como reliquias, sacramentos, evangelios, cruces, imágenes y especialmente la Hostia.
¿Cuando cometemos sacrilegio al comulgar?
Cometemos sacrilegio al comulgar cuando lo hacemos sin estar en estado de gracia, es decir, limpios de pecados mortales. Mediante el sacramento de la confesión, debidamente hecha ante un sacerdote, volvemos a estar preparados para recibir la Eucaristía como es debido.
Indudablemente, si no hemos confesado los pecados graves, la mejor opción es no comulgar hasta que lo hayamos hecho.
¿Qué ocurre si faltamos a Misa en Domingo o Fiesta de Precepto?
Si faltamos a misa en domingo o fiesta de precepto y tampoco asistimos la tarde del día anterior, la víspera, estamos cometiendo pecado mortal, a no ser que hayamos faltado por causa justificada, como es una enfermedad u obligación inaplazable. Así lo explica el artículo 2181 del Catecismo de la Iglesia Católica.
En consecuencia…..
No debemos recibir la comunión la próxima vez que asistamos a misa, si no hemos confesado previamente, porque estaríamos cometiendo sacrilegio.
¿Por qué tantos creyentes cometen este error?
En la gran mayoría de los casos es por desconocimiento. El motivo de este artículo es informar a los creyentes para que puedan obrar de forma correcta.
No se comete una falta por asistir a misa y no comulgar, la falta es hacerlo sin estar en condiciones, como ocurriría con cualquier otro pecado grave.
Precisamente en el periodo vacacional, es habitual que el cambio de hábitos o de lugar de residencia nos distraiga de asistir a misa. Lo mismo ocurre con las personas que van a la iglesia de forma esporádica y sin embargo, cuando van, toman la comunión.
Lo que debemos hacer para remediar esta falta es confesar antes de volver a recibir la eucaristía, aunque lo ideal sería que no faltásemos a nuestra cita con el Señor.
Accede a otro de nuestros artículos en el siguiente enlace: El Sacramento de la Confesión de forma correcta
Gracias por la información.